Formada por 14 islas conectadas entre sí por diversos puentes, Estocolmo, capital de Suecia, es una de las ciudades más bellas y elegantes de Escandinavia. Conocida como la “Venecia del Norte” por sus canales, la ciudad no solo destaca por su ubicación natural, sino también por su arquitectura, museos y vida cultural, especialmente animada en los meses de verano. En este Post repasamos todo lo más importante qué ver en Estocolmo en 2 o 3 días.
Estocolmo, qué ver en 2 ó 3 días
Un vuelo de unas tres horas y media es lo que separa España de Estocolmo y, aunque son muchos sus atractivos, creemos que 2 o 3 días es tiempo suficiente para conocer la capital de Suecia. Además, la mayoría de los puntos de interés se encuentran en una zona bastante reducida por lo que será posible ir andando de uno a otro. Estos son los puntos que no te puedes perder :
Gamla Stan, ciudad vieja de Estocolmo
La mayor parte de la visita a Estocolmo se centra en la conocida como Gamla Stan, el centro histórico de la ciudad y la parte más antigua de la misma (fue fundado en 1255). Está formada por una calle principal, Vasterlanggatan, peatonal, y varias callejuelas empedradas plagadas de cafés, restaurantes, librerías y tiendas de antigüedades, sin duda un lugar para perderse saboreando la esencia de Estocolmo.
La plaza Stortorget, donde en 1520 tuvo lugar el conocido como baño de sangre de Estocolmo durante la guerra con los daneses, es hoy en día uno de los lugares más fotografiados y bellos de la ciudad.
La plaza está rodeada de casas de vistosos colores entre las que destaca la conocida como The Red House y el Museo Nobel, donde podemos acercarnos a la historia de Alfred Nobel, de los premios y premiados. Cuenta a demás con agradables cafés en los que parar y descansar mientras se toma el pulso a la ciudad.
En Gamla Stan podemos visitar también la catedral de San Nicolas, conocida como la “Gran Iglesia” por los habitantes de la ciudad, fue levantada en 1279 en estilo gótico y ha sido sede durante siglos de algunos de los acontecimientos más importantes del país como coronaciones, bodas o funerales.
El Palacio Real de Estocolmo, situado dentro de la Gamla Stan, es una de las atracciones más visitadas de la ciudad. El edificio actual, de estilo barroco, fue construido a principios del Sg. XVIII y ha sido durante años la residencia de la familia real sueca, aunque en la actualidad se utiliza únicamente para actos representativos.
Gran parte de sus 1200 habitaciones y salas se pueden visitar, así como el Museo de la Corona o los Apartamentos Reales. Además, cada día a las 12.15 tiene lugar su afamado cambio de guardia, en el que participa la banda real de música tocando, entre otros, temas del grupo sueco ABBA.
Para tener las mejores vistas de la ciudad vieja, podemos subir al mirador conocido como Katarinavagen o, simplemente, sentarse en algún punto de la zona conocida como Mariabergt al atardecer.
Ayuntamiento de Estocolmo
Se trata probablemente del edificio más emblemático de la ciudad de Estocolmo, ya que es aquí donde se celebra cada año la cena de la gala de los premiados por el Nobel, además de ser una imagen icónica de la ciudad y del país.
Existen varias visitas guidas cada día, de unos 45 minutos de duración, en sueco e inglés, y en más idiomas incluido el castellano en verano. Podremos conocer la Sala Dorada o el Salón Azul y descender por sus famosas escaleras por las que bajan los premiados. También es posible subir a la Torre conocida como Tre Kronor de 106 metros de altura y desde donde se tienen una de las mejores vistas de Gamla Stan.
Si por algo es conocida la ciudad de Estocolmo a nivel mundial es por albergar cada año la entrega de los famosos Premios Nobel (a excepción del premio Nobel de la Paz que se entrega en Oslo). Se trata de un galardón honorifico que entrega el gobierno de Suecia a aquellas personas o entidades que han realizado una especial aportación o contribución a la sociedad. La gala, celebrada en el Ayuntamiento de Estocolmo, tiene lugar el 10 de Diciembre, fecha de la muerte de su creador Alfred Nobel, cuya última voluntad fue la creación de estos premios para lo que dono la mayor parte de su fortuna.
Isla de Djurganden
La isla de Djurganden es otro de los lugares imprescindibles que visitar en Estocolmo ya que cuenta con numerosos atractivos para visitantes de todas las edades. Se puede llegar desde Gamla Stan bien con el tranvía numero 7 o bien en alguno de los barcos que conectan las islas.
En esta isla, conocida como “la isla de los museos”, podemos visitar el famoso Museo Nórdico dedicado a la historia del pueblo sueco; un Museo dedicado al grupo sueco ABBA que hará las delicias de los fans del mítico conjunto; el Museo Skansen, situado al aire libre y que cuenta con una muestra de casas tradicionales suecas; el Museo Junibabacken dedicado a la escritora sueca de cuentos infantiles Astrid Lindgren creadorea de Pipi Lamstrung, un zoo y hasta un parque de atracciones…
Destaca también el Museo de Ciencia y tecnología, donde visitar exposiciones sobre inventos, energía y el medioambiente de manera divertida. El museo cuenta con una colección de más de 55.000 objetos de la industria del hierro y el acero, las telecomunicaciones, la electricidad y energía renovable.
Para los amantes de la fotografía no puede faltar una parada en el Museo Fotografiska, el museo de fotografía más grande del mundo que ofrece espacios muy inmersivos donde charlar y tomar un café rodeado de un ambiente creativo. Además también tiene exposiciones temporales y permanentes de los mejores fotógrafos y artistas tanto suecos como extranjeros. Un lugar único.
Pero, sin dudas, el museo más espectacular y que no puede faltar en ninguna visita a Estocolmo es el Museo Vasa, dedicado a la construcción, hundimiento y rescate del tristemente famoso navío de guerra sueco.
El Vasa fue un navío de guerra sueco mandado construir por el Rey Gustavo II Adolfo de Suecia en 1626. Aunque no era el buque más grande de la época si era el más poderoso, cargado con decenas de cañones, ricamente decorado con esculturas… una muestra del poder de Suecia. Lo que le ha hecho pasar tristemente a la historia al Vasa es su hundimiento el 10 de agosto de 1628, a tan solo 15 minutos de comenzar su viaje inaugural. Las causas no están muy claras, pero todo apunta a que se desestabilizo a causa del viento, errores en la construcción y el mucho peso que llevaba. Siglos más tarde, el 24 de abril de 1961, fue rescatado de la bahía de Estocolmo, levantándose el Museo homónimo que se ha convertido en el más visitado de toda Suecia, y es que después de más de 300 años bajo el agua, el Vasa ha conservado un 98% de las estructuras originales del barco.
Paseo en barco por Estocolmo
Como ya hemos comentado, Estocolmo es conocida por sus muchos canales y algo que no debería faltar en una escapa a la capital sueca es realizar una excursión en barco para descubrir sus puentes más famosos, canales y otros rincones alejados del centro histórico. Una excursión que recomendamos sobremanera es la que nos acerca al Archipiélago de Estocolmo, el más grande del Báltico.
La mayoría de las opciones ofertadas realizan la travesía en barcos clásicos, partiendo desde el muelle de Strandvagen y tiene una duración de entre dos y tres horas. En este paseo podremos ver la cantidad gigante de islas y formaciones rocosas que exixten en el archipiélago, se cree que hay unas 24.000, aunque ni los expertos logran ponerse de acuerdo en el número exacto.
Dormir en un barco en Estocolmo
Estocolmo cuenta con una amplia variedad de alojamientos para todos los gustos y bolsillos, aunque hay que tener en cuenta que, como sucede en todas las capitales Bálticas, los precios suelen ser más elevados que en España. Una de las opciones más “curiosas” y a la vez económicas es la de alojarse en alguno de los barcos que aparecen anclados en la ribera del lago Mälar.
Nosotros optamos por el The Red Boat un hotel-albergue de ambiente juvenil que sin duda recomendamos si buscas una opción diferente donde pasar la noche y no eres de los que se marean fácilmente con el vaivén del barco.
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