El Parque Nacional Manuel Antonio es uno de los rincones más fascinantes de Costa Rica, donde el exuberante bosque tropical se funde con la inmaculada belleza de las playas costarricenses. Es un tesoro natural que atrapa a los visitantes por su enorme biodiversidad y paisajes de ensueño. Desde la enorme flora y fauna hasta las aguas cristalinas y las playas de arena blanca, cada rincón de este paraíso transmite una sensación de tranquilidad y asombro a partes iguales. Situado en la costa del Pacifico, en un entorno natural de enorme belleza y rodeado por las que son consideradas algunas de las mejores playas del país, Manuel Antonio es uno de los parques más visitados de Costa Rica y donde empezó la concienciación por la conservación y el turismo de naturaleza.




CÓMO LLEGAR AL PARQUE NACIONAL MANUEL ANTONIO
Que Manuel Antonio sea uno de los lugares más visitados de Costa Rica, sin duda, tiene que ver (entre otras cosas) con su fácil accesibilidad. Existen varias formas de llegar hasta aquí, os las contamos:
- En coche: Podemos llegar desde San José, la capital, a Manuel Antonio recorriendo los 170 kilómetros que les separan en unas tres horas de viaje. Aunque lo normal es llegar o continuar hacia Monteverde, otro de los grandes atractivos de Costa Rica, la distancia unos 185 km se hacen en unas tres horas y media. Y si decidimos continuar ruta al sur del país, tan solo tendremos una hora de viaje hasta el Parque Nacional Marino Ballena y dos a Sierpe, puerta de entrada habitual para conocer el impresionante Parque Nacional de Corcovado.
- En Bus: Si no contamos con vehículo propio también podremos llegar a Manuel Antonio fácilmente en autobús desde San José, Santa Elena o Quepos.
- Con Tour Organizado: Otra opción más cómoda es contratar un tour organizado desde la capital o desde otros puntos del país. En este ENLACE os dejamos varias opciones.
IDEA: Una parada habitual entre Monteverde y Manuel Antonio es el Rio Tarcoles, en la localidad del mismo nombre. Aquí nos podemos acercar hasta su famoso puente donde ver, fácilmente, varias decenas de cocodrilos americanos, cuyos machos llegan a medir unos 3-4 metros. Si bien no estamos de acuerdo en cómo se mantiene esta enorme población, pues se les alimenta a diario para el turista, hay que reconocer que impresiona ver tan de cerca estos enormes animales.


CONSEJOS PARA HACER LA VISITA
- COMPRAR LAS ENTRADAS CON ANTELACIÓN: Debido a la gran cantidad de visitantes que recibe Manuel Antonio, especialmente en temporada alta y los fines de semana, os recomendamos comprar las entradas con antelación en la Web Oficial. El precio en 2023 es de 18$ por adulto y 5,65$ los niños.
- CUIDADO CON LOS TIMOS: Costa Rica no es un país donde sea común el regateo ni donde hayamos tenido la sensación de “engaño”, excepto en Manuel Antonio. Cerca de un kilómetro antes del parking oficial nos pararon diciéndonos que había que dejar el coche allí y que NO se podía continuar (ese parking es 3 veces más caro que el oficial). Ademas nos aseguraron que NO había entradas ni posibilidad de comprarlas, con el fin de que hiciéramos con ellos un Tour Organizado con ellos. No hagáis caso y continuar.
- FUERA EL PLÁSTICO: Algo a tener muy en cuenta es que NO se permite meter a Manuel Antonio comida ni envases de plástico. Son súper estrictos al respecto y miraran a conciencia las mochilas en la entrada. Os recomendamos llevar botellas reutilizables para llenarlas en las fuentes que hay repartidas por senderos interiores, el agua es potable. En la entrada encontrareis multitud de puestos que venden este tipo de botellas pero el precio es alto.
- UN GUÍA LOCAL NOS AYUDARA MUCHO: Aunque se puede visitar por libre, creemos que es muy interesante contratar un guía que conozca el parque y sepa dónde buscar y ver animales, además de contarte curiosidades sobre ellos. La visita cambia radicalmente. En el propio parking oficial te ofrecerán los servicios de guía, por 20$ por persona, al ser un grupo grande nos hicieron un importante descuento.
QUÉ VER EN EL PARQUE NACIONAL DE MANUEL ANTONIO. PEREZOSOS Y PLAYAS
A pesar de ser el Parque Nacional de menor tamaño de Costa Rica, Manuel Antonio, es uno de los lugares más visitados y famosos del país, gracias especialmente a contar con algunas de las más bellas playas y ofrecer la posibilidad de ver un gran número de animales, entre los que destaca, sin duda el Perezoso. Nada más cruzar el puesto de control nos encontraremos con varias rutas y senderos serpenteantes que se adentrarán en el bosque tropical, frondoso y lleno de vida.


Durante la parte guiada de la visita (que dura en torno a la 1h y media) tuvimos la oportunidad de ver una amplia variedad de especies, incluidos monos capuchinos, decenas de aves, reptiles, insectos… todo un vergel de vida animal que nos cautivo, pero sin duda la guinda del pastel fue encontrarnos con varios perezosos. Aunque habíamos tenido la oportunidad de verlos en Monteverde y el Arenal, nunca había sido desde tan cerca, fue increíble poder seguir sus lentos movimientos mientras se desplazaba por las ramas. Es un animal precioso.



La visita guiada termina en un cruce de caminos (donde pudimos ver el segundo Perezoso con una cría), desde el que parten diversos senderos a las playas del parque. Por un lado, atravesando un sendero menos transitado que los anteriores, plagado de monos araña y de cara blanca, llegaremos con facilidad a Playa las Gemelas, de piedras y aguas transparentes y la Playa de Puerto Escondido, ideales ambas para descansar, pues apenas hay visitantes, pero en las que no se recomienda el baño debido a las fuertes corrientes de la zona. También parte desde aquí el sendero al Mirador, algo más exigente pero cuyas vistas bien merecen la pena.




Si volvemos sobre nuestros pasos, el sendero nos llevara directo a una de las joyas del parque, la Playa de Manuel Antonio, que nos ofrece un paisaje de postal. Una media luna de arena blanca y fina, rodeada de palmeras y cocoteros y con aguas transparentes ideales para el baño. Aunque es cierto que es la más concurrida de las playas de parque esto no le quita un ápice de su belleza (en esta playa encontramos duchas y vestuarios para cambiarse).

Para completar el recorrido por las playas de Manuel Antonio, hay que llegar hasta la conocida como Espadilla Sur, donde su arena blanca contrasta con el azul del mar y el verde de la espesa vegetación que la rodea. Aquí el baño, aunque está permitido, debe hacerse con precaución a causa de nuevo de las fuertes corrientes. Desde aquí podemos tomar el sendero que marca la salida al parque y que atraviesa un ecosistema de manglar muy interesante con varios puestos para ver aves.


Qué ver en el pueblo de Manuel Antonio. Restaurantes y alojamientos
El pueblo de Manuel Antonio no tiene grandes atractivos turísticos pero cuenta con todo lo necesario para que el turista pueda disfrutar de esta bella zona del país. Se trata de un continuo de alojamientos desde los más lujosos a pequeños hostales, restaurantes tanto de comida local como una amplia variedad de platos internacionales, puestos de comida callejeros y supermercados. Os recomendamos hacer al menos una noche para poder disfrutar del Parque Nacional de Manuel Antonio por la mañana a primera hora antes de que lleguen las hordas de turistas.
¿QUÉ MÁS SE PUEDE HACER CERCA DE MANUEL ANTONIO?
Si tenemos tiempo podemos descubrir más puntos importantes en los alrededores de Manuel Antonio, como la playa Espadilla Norte, que cuenta con todos los servicios y es perfecta para el baño, o alguno de sus rincones más escondidos como la playa de Biesanz una de la más bellas y poco conocidas de la zona. También merece la pena contratar un Tour por los Manglares que rodean al pueblo, de alta importancia ecológica o realizar algún deporte de aventura como tirolinas, puenting o disfrutar de un trekking nocturno.
EL IMPACTO DEL TURISMO MASIVO EN MANUEL ANTONIO
La popularidad de Manuel Antonio ha sido una espada de doble filo. Por un lado, ha impulsado la economía local, generando empleo y desarrollo en las comunidades cercanas. Sin embargo, este flujo constante de turistas también ha traído consigo una serie de desafíos ambientales y sociales.
- Degradación del Hábitat: El incremento en el número de visitantes ha ejercido una presión considerable sobre los recursos naturales del parque. Las áreas de senderos y playas a menudo se ven afectadas por la erosión y la compactación del suelo, lo que puede alterar el hábitat de muchas especies.
- Contaminación: A pesar de los esfuerzos por mantener el parque limpio, la gran cantidad de turistas inevitablemente genera desechos. La basura, así como los desechos orgánicos y químicos provenientes de los productos de cuidado personal, pueden contaminar el agua y el suelo.
- Interacción Humana y Vida Silvestre: El contacto cercano y frecuente con los animales del parque ha cambiado el comportamiento natural de algunas especies. Por ejemplo, los monos y mapaches, atraídos por la comida de los turistas, pueden volverse dependientes de fuentes alimenticias no naturales, lo que afecta su salud y comportamiento.
Medidas de Conservación y Gestión
Reconociendo estos desafíos, las autoridades del parque y diversas organizaciones han implementado varias medidas para mitigar el impacto del turismo:
- Control de Visitantes: Se ha establecido un límite diario de visitantes para reducir la presión sobre el ecosistema. Actualmente, solo se permiten 600 personas por día en los días laborables y 800 en fines de semana y feriados.
- Educación Ambiental: Se realizan esfuerzos constantes para educar a los visitantes sobre la importancia de la conservación y el respeto por la vida silvestre y los entornos naturales.
- Mantenimiento de Infraestructura: Mejoras en los senderos y facilidades del parque ayudan a minimizar el impacto de la erosión y a manejar mejor el flujo de turistas.
LLAMADA A LA RESPONSABILIDAD 
Visitar el Parque Nacional Manuel Antonio es una oportunidad para experimentar la belleza y la biodiversidad de Costa Rica, sin embargo, es crucial que tanto los turistas como las autoridades locales trabajen juntos para garantizar que este tesoro natural se preserve para las generaciones futuras. La responsabilidad recae en cada visitante: respetar las normas del parque, no alimentar a los animales, mantener los senderos y playas limpios, y apoyar las iniciativas de conservación. Solo a través de un turismo sostenible y consciente, el Parque Nacional Manuel Antonio podrá seguir siendo un refugio para la vida silvestre y una joya natural para todos los que lo visitan.
Como Costarricenses les agradecemos sus bellas palabras sin embargo sabía que este parque tiene una situación muy difícil por la cantidad de turistas qué lo visitan? por lo cual ya la flora y fauna esta afectada. Los animales no buscan comida, esperan que los turistas los alimenten, por mencionar una sola situaciones, este parque se debió cerrar hace más de 10 años para recuperarlo, sin embargo los intereses económicos y políticos lo mantienen abierto al público. El propósito de estos parques es conservar no para que los turistas disfruten, además Costa Rica tiene otros parques y playas qué pueden visitar. Si realmente desea apoyar no visiten ese parque
Hola María, aquí dejamos tus palabras que esperamos inspiren a los viajeros a practicar el turismo responsable que este y cualquier destino necesita. Un saludo!