Continuando nuestra ruta en coche por Croacia nos adentramos en la región de Dalmacia y hacemos la primera parada en la ciudad de Zadar, centro administrativo, turístico y cultural además de parada obligatoria en el viaje. Su casco antiguo atesora una enorme riqueza arquitectónica y en sus alrededores se puede disfrutar de bonitas playas y Parques Nacionales tan espectaculares como el de Krkra.
Zadar, qué ver en la alegre capital de Dalmacia
De origen lliriano, por sus calles han pasado numerosas civilizaciones cuya impronta ha quedado patente en sus edificios que combinan diversos estilos arquitectónicos. Su parte vieja se asienta en un istmo rodeado de una imponente muralla en la que destacan dos de sus puertas principales: la Puerta Zara o puerta de Tierra firme construida en 1543 y la Puerta del Puerto.
Los mayores atractivos de la ciudad se encuentran precisamente dentro de su recinto amurallado, intramuros podemos pasear por los restos del Foro Romano, levantado durante la época del emperador Cesar Augusto, en el siglo I. Encima de parte del Foro se asienta la actual Iglesia de San Donato, símbolo de la Zadar, construida en época prerrománica siguiendo los cánones bizantinos, del siglo IX. Lo que más destaca de ella es su planta redonda, coronada por una cúpula de 27 metros de alto y aunque dedicada al Obispo Donato está realmente consagrada a la Santísima Trinidad. Aun se puede ver en su interior restos de las columnas y capiteles romanos del foro.
No muy lejos, se alza la Catedral de Santa Anastasia de Zadar, del siglo XII y que mezcla los estilos románico tardío y gótico, de la que podemos destacar los rosetones de la facha frontal. Es la más grande de Dalmacia y desde lo alto de su campanario se tienen una de las mejores vistas de la ciudad.
Pero es junto al mar, en su precioso paseo marítimo, donde encontramos las construcciones más originales de la ciudad. Por un lado el conocido como Órgano del Mar, creado por Nikola Basic en el año 2005, que está formado por una serie de escalones de mármol y 35 tubos situados por debajo de ellos que funcionan como tubos de un organo al entrar y salir el agua del mar enviada por el oleaje. Cada vez que rompe en él una ola se produce un sonido distinto, sin duda un lugar mágico en el que relajarse.
Junto a él, encontramos un círculo de 22 metros de diámetro conocido como el Saludo al Sol, formado por células fotovoltaicas que durante el día absorbe la luz solar y la irradia por la noche en forma de diferentes colores.
En la actualidad Zadar es una ciudad joven y moderna, con una amplia oferta cultural y de ocio, como muestra sus numerosos cafés y restaurantes con encanto que ocupan cada rincón del casco histórico. Sin duda una de las grandes sorpresas del viaje y en la que nos hubiera encantado pasar más tiempo.
Parque Nacional de Krka (desde Zadar), un baño en las cascadas croatas
A menos de una hora en coche de Zadar, en el centro de la región dálmata, encontramos este fantástico Parque Nacional que recibe su nombre del rio Krka que lo alimenta.
Aunque suele estar a la sombra del famoso Parque Nacional de los Lagos de Plitvice, Krka es otra parada obligatoria en un viaje por Croacia. Cataratas y lagos de agua transparente rodeadas de una profunda vegetación son su carta de presentación.
Para acceder al Parque, Skradinski Buk en croata, hay que dejar el vehículo en la localidad de Skradin, desde donde se toma el barco que, en unos 20 minutos, nos deja ya en el corazón de Krka. A escasos metros aparece ante nosotros su cascada más famosa, Skradinski, que cuenta con añadido de poder bañarse en ella, todo un reclamo turístico, especialmente en los meses de verano.
Tras refrescarnos, lo mejor es continuar descubriendo el parque siguiendo los senderos de madera que nos acercan a los distintos miradores desde donde apreciar la belleza de otras cascadas y saltos de agua en los diferentes niveles creados en la roca caliza y, que salvando las distancias, nos recuerdan al Sitio Natural de Semuc Champey en Guatemala. Es posible, si se cuenta con más tiempo, ampliar la excursión hasta la isla de Visovac o el Monasterio y ruinas de la fortaleza Trosenj.
El precio de las entradas, como en la mayor parte de los Parques croatas varían según la época del año por lo que para tener una información actualizada de los mismos lo mejor es consultar su página web
Si la visita al Parque Nacional de Krka os parece poco, existe la posibilidad de hacer una excursión desde Zadar a los Lagos de Plitvice en Tour Organizado, podéis encotrar toda la información en este enlace.
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