Una de las muchas sorpresas que guarda la provincia de Cuenca (Castilla La Mancha) es la ciudad romana de Segóbriga. Localizada en el cerro Cabeza de Griego, es uno de los asentamientos romanos mejor conservados de la Meseta, aunque en realidad Segóbriga tiene un origen celtíbero ya que se han encontrado restos de cerámica del Sg. V a.C., así su nombre deriva de “sego”, victoria y “briga”, ciudad o fortaleza, por lo que se traduciría como Ciudad de la Victoria.
Su verdadera importancia llegaría en la época romana. El propio Plinio hablo en su obra Naturalis Historia de esta ciudad cuya riqueza creció a raíz de la explotación de las minas del lapis specularis en sus cercanías.
Las primeras excavaciones arqueológicas comenzaron en 1888 y aun en la actualidad continúan los trabajos en la zona lo que permite seguir descubriendo y ampliando los términos de esta antigua urbe.
Segóbriga, como llegar y datos prácticos
Las ruinas de Segóbriga se encuentran en la provincia de Cuenca, en concreto pertenecen al término municipal de Saelices, en la carretera CM 310 s/n. Para acceder desde Madrid basta con tomar a A-3 hasta la salida 104, está perfectamente señalizado desde la misma autovía.
Existe la posibilidad de contratar un Tour desde Cuenca que recorre la conocida como Ruta del Cristal de Hispania donde se visita Segobria y las minas del Lapis, podeís encontrar toda la información en este enlaceEl Parque está abierto del 1 de octubre al 31 de marzo de martes a domingo de 10 a 18h; mientras que durante el verano lo hace de 10 a 19.30h los mismos días, el acceso termina 45 minutos antes del cierre. La tarifa normal es de 6€ y los martes y viernes por la tarde la entrada es gratuita. Para más información podeis pinchar en este enlace de la pagina de Patriomonio de Castilla la Mancha.
Segóbriga, la visita al parque arqueológico de Cuenca
Visitar las ruinas de Segóbriga nos transporta al desarrollo urbano y social de la meseta durante la época romana, especialmente de los siglos I y II a.C. en su momento de máximo esplendor donde, tras convertirse en el centro económico de la región gracias sobre todo a la explotación del lapis specularis, recibió por parte del propio Cesar Augusto el rango de municipio, acuñando su propia moneda y realizándose en ella numerosas obras publicas hoy visitables.
Nada más dejar el coche en el parking gratuito hay que dirigirse al centro de interpretación de las ruinas donde, además de encontrar mapas y toda la información necesaria para realizar la visita, se proyecta un documental de unos 20 minutos sobre la ciudad, la vida en ella y los proyectos y excavaciones llevadas a cabo. También merece la pena dedicarle un tiempo al pequeño museo anexo en el que se exponen algunas de las piezas más importantes halladas durante las excavaciones: mapas, esculturas de personajes ilustres de la época, monedas, utensilios varios.
Saliendo del centro de interpretación comenzaremos la visita a las ruinas de Segóbriga que nos puede llevar algo más de dos horas. El camino está perfectamente señalizado con paneles informativos en cada punto de interés y es accesible para carritos y personas con discapacidad, además cada pocos metros encontramos una fuente con agua potable, lo que se agradece sobre todo durante el verano.
Los puntos más importantes a visitar son siguiendo la ruta de la visita son:
Extramuros, desde el centro de Interpretación hasta la entrada a la ciudad:
— Los restos del Acueducto, una conducción de hormigón para traer el agua desde la vecina Saelices.
— La Necrópolis, que estaba situada extramuros en las salidas de la ciudad, se pueden ver varias de ellas siguiendo el camino desde el centro de Interpretación al antiguo Museo.
— Basílica Visigoda, edificio dedicado al culto religioso fue el primero en ser excavado, en el se encontraron las tumbas de los obispos Sefronio y Nigrino.
Dentro de la Ciudad:
— Puerta Principal y las Murallas. Durante la época de Augusto Segóbriga llego a contar con más de 1300 metros de murallas y varias puertas, de ellas en la actualidad se conserva la conocida como Puerta Monumental que da acceso al Foro y está junto al Teatro.
— El Teatro es probablemente el elemento arquitectónico más emblemático de la ciudad a pesar de sus pequeñas dimensiones. Se inauguró en torno al año 78 d.C y en su graderío se pueden diferenciar las tres partes que se utilizaban para dividir a los espectadores por clases sociales. Aun hoy se conserva la orquesta, el tablado y varias columnas así como esculturas de mármol que han sido guardadas en el museo. El teatro de Segóbriga sigue albergando en la actualidad la representación de obras especialmente en los meses de verano y en época escolar son muchos los grupos de estudiantes que lo visitan.
— El Anfiteatro, construido frente al anterior que con una capacidad para 5500 personas es el mayor edificio de la ciudad. Presenta una forma de elipse irregular de unos 75 metros de longitud y para mayor seguridad de los asistentes a los espectáculos que en él se llevaban a cabo, la arena estaba separada del graderío por un alto pódium.
— Las Termas del Teatro y el Gimnasio. Situadas detrás del teatro, estaban destinadas a la formación de los jóvenes de la ciudad y a su iniciación en el Culto Imperial. En el recinto se encontraba una sauna de agua caliente y otra de agua fría, una piscina, las letrinas y vestuarios.
— El Foro o plaza de la ciudad, ocupaba un espacio rectangular en la vía principal. Estaba rodeado de numerosas columnas y era el centro político y social de Segóbriga. Se construyo sobre el año 15 a.C en época de Augusto como parte del programa de urbanización de la ciudad. Es uno de los descubrimientos más recientes del parque.
Esta es la vista de todo el Parque Arqueológico desde nuestro Dron
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Sería recomendable visitar también los exteriores de la ciudad.Adentrandonos en el monte (los romanos lo llamaban bosque sagrado) nos encontramos con el templo de Diana,los restos de la antigua calzada romana y aún más adentro con una cantera .
Gracias Daniel por el apunte! Lo dejamos pendiente para la próxima visita a Segóbriga. Un saludo!!!