Si existe en el mundo una ciudad asociada al ocio, la diversión y la fiesta es, sin duda, Las Vegas (EEUU): cientos de casinos, neones, lujo, espectáculos y un sinfín de actividades son la carta de presentación de esta mega-urbe levantada en mitad del desierto de Mojave.
Perteneciente al actual estado de Nevada, la ciudad recibió su nombre del viajero español Antonio Armijo que en 1829 recorría la ruta comercial conocida como “camino español” que unía Sante Fe (Nuevo Mexico) con Los Angeles (California), y que al llegar a esta zona, encontró numerosos manantiales con agua en abundancia para los viajeros, convirtiéndolo en una zona de “vegas” en medio del desierto. La ciudad como tal no se fundó hasta el año 1905, pero fue tras la legalización del juego en 1931 y, más aun, con la construcción de los primeros hoteles con casinos y juegos de azar cuando comenzó su fama mundial, siendo para muchos una autentica “ciudad del pecado”.
En principio de toda nuestra Ruta por la Costa Oeste de los Estados Unidos, la visita a la ciudad de Las Vegas era lo que menos nos atraía, pero tras pasar casi dos días en ella reconocemos que bien merece una visita.
QUÉ VER Y HACER EN LAS VEGAS
Visitar la Gran Pirámide de Keops, la Torre Eiffel, los canales de Venecia, la Estatua de la Libertad, disfrutar de espectáculos como los del Cirque du Solei, el mago David Cooperfield, conciertos de cantantes de prestigio mundial, casarse vestido de Elvis Presley o Marilym Monroe… son unas de las pocas y más típicas cosas que se pueden hacer en Las Vegas, por lo que quizás lo más correcto es plantearse que NO se puede hacer o ver en Las Vegas, que realmente es casi nada. Las posibilidades de ocio en la “ciudad que nunca duerme” son prácticamente ilimitadas incluso para los que no vengan con la intención de jugarse sus dólares en alguno de sus casinos. Y, sobre todo, recordad la mítica frase “lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas”.
La principal atracción de la ciudad es recorrer la calle conocida como The Strip, donde a lo largo de sus 16 kilómetros encontraremos los hoteles y casinos más espectaculares de la ciudad y que hemos visto en multitud de ocasiones en cientos de películas, además podremos entrar en tiendas de todo tipo y presupuesto, desde las boutiques más prestigiosas a las baratas y típicas tiendas de souvenirs. Y como no podría ser de otra manera, las más conocidas cadenas de restaurantes del país se juntan todas a los largo de esta eterna calle.
Durante el día, el calor en Las Vegas es sofocante, así que lo mejor es visitar el interior los casinos. Los más famosos, entre otros muchos, son el Luxor, con la recreación de la pirámide de Keops; Mandalay Bay, tristemente conocido por la matanza que tuvo lugar allí en septiembre de 2017 y que coincidió con nuestra visita a la ciudad; el Mg Grand Las Vegas; el New York New York y su estatua de la Libertad; el Paris Las Vegas con la representación de la Torre Eifell; el Caesars Palace; el Excalibur Hotel, el The Venetian y su recreación de los canales venecianos…
Pero, al caer la noche, si hay algo imprescindible que ver en The Strip es el magnífico espectáculo de luz, agua y sonido de las Fuentes del Bellagio. Sus más de 1200 chorros se instalaron en 1998 y cada 10-15 minutos “bailan” al son de una de las treinta melodías que conforman el espectáculo.
Otro de los grandes atractivos es subir a la High Roller (frente a Caesars Palace), que con sus 167.6 metros de altura es la noria panorámica más alta del mundo. Consta de 28 cabinas con capacidad para cuarenta personas cada una y en total el vuelo dura unos 30 minutos ofreciendo una de las mejores vistas de The Strip.
Cómo moverse por The Strip. Cómo ya hemos comentado, la calle más famosa de Las Vegas tiene una longitud de 16 kilómetros por lo que la opción de recorrerla a pie por completo, sobre todo teniendo en cuenta el calor de la ciudad, no parece una buena idea, pero existen dos opciones de transporte público: el autobús conocido como SDX que funciona de 9 a.m. a 00.30 a.m. y recorre The Strip hasta Downtowwn cada 15 minutos, y el DEUCE, que funciona las 24 horas del día haciendo el mismo recorrido que el anterior pero parando en casi la totalidad de los hoteles. Los billetes solo se pueden comprar en las maquinas expendedoras que hay en cada parada y el precio para todo en día (valido 24h) es de 8$
Pero más allá de la mítica calle, Las Vegas ofrece otros atractivos como la Stratosphere Tower, el edificio más alto no solo de la ciudad sino de todo es estado de Nevada y que fue inaugurado en 1996, donde podremos subir a sus dos miradores, uno interior y otro exterior a 280 metros de altura. Pero, lo mejor, son las atracciones que se pueden realizar desde la azotea entre las que destaca la conocida como SkyJump, donde los más valientes podrán saltar al vacío con una caída de 250 metros.
El verdadero corazón de Las Vegas es su parte antigua y, sobretodo, la conocida calle Fremont, donde se levantaron los primeros casinos y hoteles como el famoso Golden Nugget. En la actualidad su mayor atractivo es la Fremont Street Experience que cuenta con la pantalla digital más grande del mundo y 220 altavoces, donde se ofrecen cada noche varios shows de luces y sonido. Además nos podemos lanzar en tirolina de 450 metros de largo que atraviesa la parte techada.
Cerca de allí se encuentran la mayoría de las capillas en las que se celebran las bodas temáticas así como casas de empeño, entre ellas Gold & Silver Pawn Shop, famosa por el programa de televisión “La casa de los empeños”.
Otra de las razones que atraen a los visitantes a Las Vegas son las compras, además de la multitud de tiendas que se encuentran en The Strip, la ciudad cuenta con varios outlets. El más conocido es el Las Vegas Premiun Outlets con más de 150 tiendas con grandes descuentos.
Por último, aunque debería ser el principio, no podemos dejar de hacernos la foto con el cartel Welcome to the fabulous Las Vegas.
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