Blog para viajeros incansables
Al planear nuestro primer viaje a Grecia decidimos centrarnos en el Peloponeso y todas sus ruinas (Delfos, Micenas, Epidauro…), conocer la impresionante Meteora y relajarnos en las islas de Zante, Santorini y Milos. Nuestro “problema” fue que dejamos poco más de un día para conocer Atenas y, aunque no nos arrepentimos, puesto que disfrutamos de un viaje estupendo, tenemos que reconocer que nos faltó tiempo, y mucho, para conocer la capital Helena. Si contáis con poco tiempo, como fue nuestro caso, aquí os dejamos una pequeña guía de qué ver y hacer en la Acrópolis y sus alrededores, una idea perfecta para una rápida toma de contacto de 1 día.
La Acrópolis de Atenas. Qué ver, información y consejos para la visita
La Acrópolis es, sin duda, la joya de la corona de Atenas, Patrimonio de la Humanidad desde 1987 y uno de los lugares más visitados del Mundo gracias a su increíble valor histórico, artístico y cultural. Realmente impresiona estar, por fin, delante de este magnífico conjunto arquitectónico que tantas y tantas veces hemos visto y estudiado.
Con el nombre de Acrópolis se designaba a la parte alta de las ciudades griegas y la Acrópolis de Atenas, situada en una colina a unos 80 metros de alto y dominando el paisaje de la capital helena, es la más impresionante de toda Grecia. Aunque se cree que la zona estaba habitada desde el tercer milenio a.C. las evidencias más importantes datan el año 1200 a.C. como el momento en el que se construyó un primer palacio y parte de las murallas. Posteriormente se levantarían varios templos, ya desaparecidos, hasta la conocida como Edad de Oro o Edad de Pericles (480-404 a.C.) cuando, durante el mandato de este político ateniense, se construyeron la mayor parte de los edificios que hoy podemos visitar. Se tratan fundamentalmente de edificios públicos y templos, dedicados a distintos dioses y, en especial, a Atenea.
La Acrópolis de Atenas se puede visitar por libre o contratando en la entrada alguno de los guías oficiales allí presentes, pero también podemos elegir un tour organizado con guía en español que incluye la propia entrada.DATOS PRACTICTOS PARA VISITAR LA ACRÓPOLIS
El horario de visita varía a lo largo del año: en invierno se puede visitar de 8-17h mientras que en verano se amplia de 8-20h. Los precios de las entradas también cambian, siendo de 20€ en temporada alta, mientras que en temporada baja el precio disminuye a los 10€ por persona (también se pueden comprar los tickets On-line y evitar colas). En cualquier caso, os aconsejamos visitar su página web oficial para planear vuestra visita y ver los posibles descuentos. Para su visita, en la actualidad, la Acrópolis cuenta con dos puertas de acceso: la principal, al oeste, a la que llegaremos tomado los metros 1 y 3 hasta la estación Monastiraki y cruzando el barrio de Plaka por las calles Areos y Dioskouron. En esta puerta encontramos las taquillas principales y la mayor oferta de guías y excursiones. La puerta secundaria se ubica al sureste, llegamos hasta ella bajándonos en la estación de metro de Acropoli (línea 2) y caminando 120m hasta las taquillas Os recomendamos hacer la visita a primera hora de la mañana, tanto para evitar la marabunta de personas que llegan a visitar la Acrópolis todos los días, como, en época de verano, el intenso calor que hace a medio día. Por este último motivo es también importante llevar agua suficiente y un gorro.
Principales Templos y restos arqueológicos de la Acrópolis de Atenas. Lo más importante qué ver
Símbolo de la cultura europea y lugar de nacimiento de la democracia, la Acrópolis de Atenas contaba con templos dedicados a distintas deidades y numerosos espacios públicos y de reunión. El impulsor de las obras, como ya comentamos fue Pericles, mientras que Filipo se convirtió en el principal escultor y director de la obra. Mucho se ha escrito y estudiado de todo lo que podemos ver en la Acrópolis, aquí os vamos a dejar un breve resumen de los principales restos arqueológicos que nos encontraremos durante nuestra visita:
Teatro de Dioniso
El Teatro de Dionisio fue el primero pavimentado del mundo y contó con una capacidad para 17.000 personas, lo que le convirtió en el más grande de la Antigua Grecia. Aquí se “estrenaron” las obras Eurípides y Sófocles entre otros (ahí es nada). El Teatro de Dionisio se encuentra algo alejado si entramos por la puerta principal pero será de lo primero que veamos si accedemos por la puerta del sureste.
Odeón de Herodes Ático
El Odeón de Herodes Ático fue construido en el año 161 a.C. a petición del cónsul romano del mismo nombre para llevar a cabo diferentes espectáculos musicales. En el siglo XX fue reconstruido por lo que a día de hoy sigue utilizándose para tal fin.
Stoa de Eumenes
Se trata de un pasadizo porticado de unos 160 metros que va desde el Teatro al Odeón. Además de sur usado por los atenienses como zona de paso, también era un importante punto de reunión de sus habitantes.
Los Propolios, la entrada a la Acrópolis
Se trata de la verdadera entrada a la Acrópolis, se llega hasta a ellos tras subir unas escaleras que parten de las taquillas. Mandados levantar por Pericles en el 431 a.C. en realidad nunca fueron terminados por culpa de las Guerras del Peloponeso.
Templo de Atenea Nike
El Templo de Atenea Nike es una de las primeras maravillas de la Acrópolis, fue construido para conmemorar en la Batalla de Salamina del año 420 a.C. Este templo jónico de 8 metros de altura es una reconstrucción del año 1835 y rara vez se puede acceder dentro.
Erecteion, Templo de Erecteo o de las Cariátides
Uno de los Templos más impresionantes y famosos de la Acrópolis es el conocido como Erecteion o Templo de Erecteo. Este templo de dos niveles de altura fue levantado en el año 406 a.C en honor a Atenea y Poseidón, y consagrado al rey mítico de Atenas, Erecteo. Su fama proviene de la fachada sur donde se dispone la Tribuna de las Cariátides, obra de Calimacos, discípulo de Fidias ¿Quién no ha visto la conocida imagen de sus 6 columnas con forma de mujer? Estas Cariátides representan a las esclavas del pueblo de Karys que fue castigado por colaborar con los persas (las columnas que vemos aquí son una copia de las originales que se muestran en el Museo de la Acrópolis).
Partenón, el Gran Templo de Atenea
El Partenón es, sin duda, el edificio más representativo de la Acrópolis y obra cumbre de la arquitectura de la Grecia clásica. Uno se siente pequeño al ponerse delante de esta maravilla que tantas veces hemos visto en libros y fotografías. Con una dimensión armónicamente perfecta, el Partenón tiene cerca de de 70 metros de largo, 30 de ancho y estaba totalmente rodeado por columnas de 10 metros de alto y, a pesar de los numerosos saqueos, guerras y bombardeos que ha sufrido a lo largo de su enorme historia se conserva en muy estado, aunque siempre está en proceso de restauración y raro es el día que no tiene algún andamio en su perímetro. en el año 432 a.C. Fue consagrado a la diosa Atenea, pues en su interior albergaba una imagen en oro y marfil de la diosa.
Deberíamos destacar el friso del Partenón, de 160 metros de largo que rodeaba la parte superior de la cella. Obra maestra de la escultura griega clásica, fue realizado en bajorrelieve con mármol en estilo jónico (aunque el edificio es dórico). Representa (probablemente) la procesión de las Grandes Panateneas, que tenía lugar cada cuatro años en honor de la diosa Atenea. A día de hoy sobreviven 128 metros del friso original que se encuentran repartidos en su mayoría entre el Museo Británico y el Museo de la Acrópolis de Atenas.
HUYENDO DE LAS AGLOMERACIONES EN LA ACRÓPOLIS DE ATENAS
En temporada alta (y en cierta media en baja también) es muy normal que se formen colas enormes, de varias horas de espera, para poder entrar en la Acrópolis. Aglomeraciones y aburrimiento que podemos evitar con estos pequeños consejos:
- Comprar las entradas antes de la visita vía On-line, podéis hacerlo en este ENLACE.
- Visitar la Acrópolis por la mañana (nunca por la tarde) y llegar a la puerta de entrada, como mínimo, 30 minutos antes de que abran.
- Usar la puerta de acceso secundaria y menos conocida situada al sureste.
- Ver lo primero de todo el Partenón y dejar el resto de edificios para después.
- Apuntarse a alguna visita o Tour organizado que tenga el horario establecido de antemano
Qué ver en los alrededores de la Acrópolis de Atenas
Atenas es una ciudad vibrante, llena de vida y más allá de sus impresionantes restos arqueológicos cuenta con muchos atractivos para pasar dos o tres días entre sus animados barrios, mercados, plazas… por ello, tenemos claro que volveremos para saborear con más calma la milenaria capital griega, pero por ahora os dejamos lo mejor qué ver en las inmediaciones de la Acrópolis, unas paradas perfectas para combinar con la visita al conjunto monumental.
Monte Filopapo, el mirador de la Acrópolis
El Monte de Filopapo es famoso por tener una de las mejores vistas a la Acrópolis y un atardecer de esos que enamoran y con los que Grecia nos ha acostumbrado. Se trata de un amplio espacio natural al que se accede por un camino principal que parte muy cerca de la entrada a la Acrópolis, también podemos encontrar varios senderos secundarios ideales para caminar y descansar del ajetreo de la ciudad.
Su nombre proviene del monumento que corona la colina, dedicado al sirio Julio Antíoco Filopapo, ultimo príncipe del reino Comagene, que falleció en 116 d.C. y en cuya parte delantera destaca el relieve conservado de una cuadriga. Realmente os recomendamos no perderos esta visita y las vistas desde el Monte Filopapo hacia la Acrópolis y toda la ciudad, pues conseguiréis una de las postales más famosas de Atenas.
Algunos viajeros dudan entre subir al Monte Filopapo o al Monte Licabeto, al que se llega a través de un funicular y cuyas vistas de la ciudad dicen ser las mejores. Si tenéis tiempo, no lo dudéis, visitar los dos.
Barrio de Plaka, el más antiguo de Atenas
El Barrio de Plaka, conocido también como “el barrio de los Dioses” debido a su ubicación justo bajo la acrópolis, es a día de hoy una de las zonas más de moda entre viajeros y turistas. Se trata, junto al adyacente barrio de Monastiraki, de la parte más antigua de Atenas, de origen turco y que se muestra como un pequeño pueblo dentro de la gran ciudad.
La entrada principal a Plaka se hace a través de la Puerta de Adriano, muy cercano al Templo de Zeus Olímpico, un arco de 18 metros de alto levantado en honor al emperador romano Adriano. Pese a los miles de visitantes que recibe a diario, Plaka conserva su esencia y autenticidad, nos encantó perdernos por sus callejuelas y recorrer las varias placitas, como la de Filomousou Eterias, en las que encontraremos buena parte de la vida del barrio. Plaka está plagado de tiendas de recuerdos y productos típicos, joyas, artesanía, souvenirs… además de una gran variedad de restaurantes, bares y encantadoras terrazas en las que probar alguna de las especialidades de la cocina griega.
Grecia cuenta con una rica y muy variada gastronomía entre la que destacan platos tan famosos como la musaka, la ensalada griega con sabroso queso feta, las brochetas Souvlaki o los pasteles de hojaldre Spanakópit pero, sin duda, el plato más famoso entre toda la comida griega es el Gyros o Gyro. Como seguro sabéis se trata de una especie de “bocadillo” o sándwich de carne asada en un horno vertical, generalmente de cerdo y servido en un pan de pita acompañado de verduras como tomate, pimiento o cebolla además de patatas fritas y, por su puesto, con abundante salsa. La más famosa es la salsa de yogurt o tzatzikv. Este “bocado” llegó a Grecia en la década de 1920 de la mano de refugiados provenientes de Asia Menor, no en vano nos recuerdan mucho a los Donër turcos.
Paseando por Plaka nos encontraremos con varias iglesias bizantinas, como la de San Nicolás del sg. XI, así como cristianas, entre las que destaca la Mitropoli o Catedral de la Anunciación de la Santa María construida en 1842.
Otro monumento singular que podemos encontrar en Plaka es la Linterna de Lisicrates, levantado en el año 334 a.C, conmemora un premio recibido por la ciudad de Atenas a la mejor obra teatral que se llevó a cabo durante el festival de Teatro de Dionisios y que fue dirigida por el propio Lisicrates. En 1670 fue trasformado en Monasterio por una orden capuchina y el mismísimo Lord Byron se alojó aquí en uno de sus viajes por Grecia.
Barrio de Monastiraki, uno de los más animados de Atenas
Junto al barrio de Plaka encontramos el barrio de Monastiraki cuyo nombre proviene de un pequeño monasterio bizantino del Sg. X localizado entre sus calles. Monastiraki es un barrio que merece la pena conocer caminando sin rumbo fijo y perdiéndose por el entramado que forman sus callejuelas y mercados de origen turco. Se trata de uno de los barrios más animados de la capital ateniense, una zona comercial destacada en la que también encontremos bares, restaurantes y terrazas en las que probar una buena comida o cena con la acrópolis como telón de fondo, ¿qué más se puede pedir?
El centro neurálgico de Monastiraki es plaza que lleva su nombre, en la que encontramos la parada de metro homónima, una de las más antiguas de Atenas, y un auténtico hervidero de gente en el que se mezclan los turistas con los propios atenienses que tienen en Monastiraki su punto de reunión. En la misma plaza se levanta la Mezquita Tzisterakis, construida por el gobierno de Mustapha Agha Tzisterakis en 1759, utilizándose para ello restos de las columnas del templo de Zeus Olímpico. Destaca también la Ekklesia Kimisi Thetokou Mitrespoleos o Iglesia Pantanassa.
No nos podemos perder el mercado de Monastiraki, un hormiguero de estrechos callejones de marcado carácter turco que sin duda se asemejan a los bazares otomanos y donde podremos encontrar todo tipo de productos, desde ropa y calzado de segunda mano hasta especias, comida o los mejores recuerdos y productos típicos griegos.
En la famosa calle Ermou, una de las arterias comerciales más importantes de Atenas, encontramos una de las joyas mejor guardadas, la Iglesia de Kapnikarea, dedicada a la Virgen María, y considerada una de las mejores muestras de arte bizantino de la ciudad. Fue construida en el Sg. XI, sobre los restos de un antiguo templo griego y hoy en día se muestra como un oasis, rodeado de modernos edificios.
En Monastiraki encontramos también tres restos de arqueológicos de enorme importancia:
Ágora Romana de Monastiraki
El Ágora Romana o foro romano era el centro neurálgico y de reunión de la ciudad, aquí se llevaban a cabo los más importantes espectáculos culturales y políticos. En el mismo recinto encontramos también la Mezquita Tethaye y la conocida como Torre de los Vientos, levantada en el Sg I d.C. a petición de un astrónomo macedonio y que ha sido usada tanto de reloj como de veleta.
Ágora Antigua
El Ágora Antigua por su parte fue construida en el año 159 a.C., sirvió como centro comercial, político y social de la época, ¡el mismísimo Sócrates expuso sus ideas aquí!. La que podemos visitar hoy en día es una reconstrucción que alberga el Museo del Ágora de Atenas. En una colina adyacente al ágora encontramos uno de los templos mejor conservados de la ciudad de Atenas, el Templo de Hefestion o Hefesto.
Biblioteca de Adriano en el barrio Monastiraki
La Biblioteca de Adriano fue en su época uno de los edificios más lujosos de la ciudad. Construido por el propio emperador Adriano en el año 132 d.C. poseía una valiosísima e incalculable colección de libros.
TICKET COMBINADO A LA ACRÓPOLIS Y OTROS 6 SITIOS
IDEA: Existe un ticket combinado para visitar la Acrópolis y otros 6 puntos de interés turístico en Atenas por un precio de 30€ para adultos. La entrada combinada incluye la visita a la Acrópolis de Atenas y los siguientes sitios: Biblioteca de Adriano, Ágora Antigua y su museo, Ágora Romana, Kerameikos y su museo, Liceo (Lykeion) y Templo de Zeus Olímpico. El precio de estas visitas está entre 4€ y 8€, así que el ticket combinado sale bien de precio si vais al menos a dos o tres de estos lugares. La duración del ticket combinado es de 5 días. Este ticket se puede comprar en las taquillas de cualquiera de los lugares visitables (os recomendamos comprarla en cualquiera de los 6 puntos que no son la Acrópolis para evitar esperas)
